Síntomas
Esta infección se detecta generalmente entre tres y siete semanas después del contagio formándose ampollas pequeñas y dolorosas, en los genitales o alrededor del ano que al romperse dejan úlceras superficiales, que van aumentando de tamaño y se unen entre sí.
¿Cómo se diagnostica?
Hay que acudir al médico, el que se basará en la exploración física de la zona, en el aspecto de las lesiones, y en las pruebas de laboratorio que solicite.
Tratamiento
Es necesario indicar un antibiótico específico por lo menos durante siete días y seguir con vigilancia médica por tres meses, hasta estar seguros de la curación.
